Semana 5: Cuestión de carácter
En el salón dan las diez de la mañana. El sol entra por los ventanales calentando las mesas de billar y los
futbolines. El polvo depositado durante meses por todo el bar ha ensuciado la
cara de los pequeños jugadores de fútbol y parecen niños que se lo pasan en
grande jugando en un campo de hollín.
Al fondo de la gran sala está
la barra, también cubierta de una espesa capa de polvo grisáceo. Entre las
botellas de la estantería las arañas han creado trampas de tela en las que,
secos, yacen cadáveres de moscas y cucarachas.
Alguien abre la puerta
principal y un pequeño ratón se esconde en el hueco que hay debajo de la
nevera. El sol, ahora, engulle la oscuridad del local y lo que parecía estar
muerto cobra vida.
«¡Buah! No veas si tenemos
trabajo aquí. Está todo hecho una mierda. Asco total, chaval».
«¡Mira, mira! ¿Aquello era un
ratón? No me jodas, con el asco que me dan, tío».
«¡Venga! Menos cháchara y
manos a la obra. Los dueños lo quieren todo limpio para esta tarde».
Los tres hombres dejan los
bártulos sobre una de las mesas. El polvo danza entre la luz dorada movido por
el trajín de los limpiadores. Uno de ellos ha enchufado una potente aspiradora
que mueve el polvo formando cúmulos en el aire. Otro de ellos está apartando la
nevera. El pequeño ratón ha huido y está a salvo entre los muros del edificio
camino de otra aventura en su búsqueda de alimento. Una botella cae al suelo y el más joven de
los hombres canta: «No te rompas todavía, no te rompas por favor, que a toda
esta porquería voy a decir adiós».
A las cuatro de la tarde todo
el bar reluce de limpio. Los tres hombres recogen sus enseres y cierran la
puerta principal. Ellos son ahora la mugre personificada pero se sienten
satisfechos por un nuevo trabajo bien hecho.
Han
dejado una pequeña tarjeta encima de una de las mesas de billar. Escrita en
ella se lee:
«La
vida son dos días, el que naces y el que mueres, entre medio solo hay polvo.
Los
Hermanos Castillo lo limpiamos todo con optimismo.
Tel.
655555555».
R.C. Martínez
No hay comentarios:
Publicar un comentario